Bienvenido/a a mi blog personal

Bienvenido/a a mi blog personal

viernes, 15 de mayo de 2015

Belleza perdida

Con cierta frecuencia, durante alguna de las salidas a la naturaleza que este pasado invierno acostumbraba a emprender en solitario por los fantásticos parajes que ahora me rodean, (habitualmente largas caminatas en cuyo transcurso la mente acostumbra a revolverse inquieta robando protagonismo al cuerpo aletargado por el frío), mis pasos serpenteaban senderos envueltos en la neblina y la desnudez invernal que presidía el entorno se veía súbitamente acentuada por las fantasmagóricas siluetas de numerosos troncos calcinados que diseminados a ambos lados del camino  parecían esbozar un repertorio de atormentadas muecas.
Siempre que en  mis encuentros con la madre naturaleza tropiezo con tan desgraciado panorama, viene a mi memoria algo que escribí tiempo atrás utilizando el formato alegórico que la poesía ofrece, denunciando mi personal sentimiento al respecto a través del poema que sigue y que forma parte de mi libro "Rimas para el recuerdo"

















"Radiante esmeralda era el mar bajo un palio de turquesa
constelado de algodón que al suave impulso de la brisa
cuajando la tenue neblina el firmamento atraviesa
y odre de aguas argentinas de sus ubres por sorpresa
sobre los campos vacía las ánforas de su risa."
















"Eran los rios corriente de agua limpia y cristalina
sacramento de los prados en permanente ablución
persiguendo tras los meandros de destellos purpurina 
el postrer beso salino para su alma peregrina
ya calmada en la campiña la furia de su aluvión."

















"Y frondoso el verde lienzo de campestre alegoría
emblema de una floresta sin el hollín del tizón
ensuciando con sus trazos de oscura melancolía
el viejo roble y la encina que luciendo su ufanía
pregonaban la armonía del nemoroso bastión."
















"Hoy ya tan solo nos rodea la presencia mortecina
de un esmeralda cetrino y un turquesa de crespón;
el algodón en jirones de triste mueca cansina
ya no alimenta la savia del seco roble y la encina
y los meandros son arrugas de muda desolación."
















"El crepitar de pavesas torturando las colinas
es fragor que incendia el día en ardiente procesión;
ya no se oyen de las aves las cadencias cantarinas, 
ni adornan los yermos prados con cabriolas saltarinas,
encerrados sus anhelos en una oscura prisión."

















"Esta belleza perdida entierra en la entraña una espina
que lacera el sentimiento con la infame sinrazón
de quien afana al orbe entero su tersura genuina
con el fósforo encendido por la conciencia mezquina
de seres que no merecen el bálsamo del perdón."


No hay comentarios:

Publicar un comentario