Hace bien poco era impensable que nuestros caminos se despertaran con el rumor de las pisadas de tan numeroso grupo de amantes del deporte en la naturaleza practicando con sus palos ese maravilloso ejercicio de cuerpo y mente que es la marcha nórdica y que ayer vistió sus mejores galas.
La bella salida y ¿cómo no? la posterior celebración entorno a sabrosos manteles y en la más cálida y festiva compañía, han cerrado un año repleto de emociones y eventos a muchos de los cuales he tenido el privilegio de asistir y que me han aportado satisfacción personal y por encima de todo, inestimable calor de amistad.
Por todo ello quiero desde aquí manifestar mi agradecimiento a aquellos que lo han hecho posible comenzando por Alessia y Toni como líderes del grupo, siguiendo con Joan, Rafa y sus respectivas Ana, asi como con Jordi y Juan, todos ellos artífices y actores de un proyecto que hoy ya es una esplendorosa realidad.
A ellos y a todos los compañeros de salidas: ¡Felicidades y hasta siempre!
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